Blogia

Arboles muertos y mucha tinta

La venganza de Dan Carter

La venganza de Dan Carter

Autor: “Arnaldo Visconti” (seudónimo de Pedro Debrigode)

Colección: El Halcón nº 2

Edita: Bruguera, Barcelona circa década de 1940

 

Esta novela es una continuación directa de la anterior, que reseñamos en este blog hace no tanto tiempo. Al final Rock Gambler termina eliminando la coronel Clayton, que jugaba un complicaod doble juego con el Norte y el Sur. Todo eso sin abandonar su pose de descastado, deslenguado y sarcástico bueno para nada, que esconde un corazón mucho más complejo del oque se cree. Además termina de poner a los miembros del elenco de la serie: Por un lado aparece helen y Rosaline Ryan, madre e hija del fallecido Halcón que Gambler suplanta. Desde ya las mujeres desprecian a ese hombre . Y por otro lado tenemos a Dan Carter, un joven honrado y recto, oficial del ejército del sur, enamorado de la niña Ryan y que, por una casualidad, descubre que don Gambler es, en última instancia, uno de los buenos, aunque nunca lo demuestre.

Tal vez mi principal problema con el estilo de Debrigode es su carencia de estructura. En el Halcón, al menos, uno tiene la sensación que va escribiendo sin un plan estructurado, sin tener idea  (o con una idea muy vaga) de cómo terminará todo, confiando que los personajes (que sí son una de sus bazas fuertes) sostendrán el interés del lector. Teniendo en cuenta que la serie no duró muchos números, posiblemente no haya sido una buena idea.

Y la sensación que queda es que realmente el autor no está muy interesaod onc la historia que le quieren imponer contar. Debrigode no quiere competir ocn el Coyote. Se le nota que está tratando de escribir otra cosa. Y cuanod tiene que ponerse en modo heroe lo hace forzado y sin entusiasmo. Es en ese desgano por lo que está obligado a hacer que está la raíz de que este serie no sea lo suficientemente interesante.  Al menos en la opinión de este lector.

 

El sabio de Sión y Diario de viaje por Medio Oriente

El sabio de Sión y Diario de viaje por Medio Oriente

Autor: Brian Janchez

Edita: Ediciones Noviembre/Ediciones Llantodemudo, Buenos Aires/Córdoba, 2013

 

Reconozco que, en general, el comic autobiográfico no me seduce. No el concepto “per se”, sino porque, vamos, no creo (a diferencia de la gente que sí le gusta el género) que hacer entretenida la realidad sea solo una cuestión estilística, que hasta la vida más banal se hace entretenida bien contada. Y no es así: para leer vidas aburridas, me alcanza con mi propia cotidianeidad. Y una cosa es leer Persepolis de Satrapi (con todo su desarraigo y problemática política... aunque la sensación es que Satrapi es una chica de familia bien que pudo irse justamente porque era una chica que tenia gente que conocía gente y por eso tenía una ventaja por sobre le 90% de sus coterráneos) o Maus (que se sostiene porque le padre de Spiegelman le pasan cosas.. terribles peor le pasan) o el trabajo de Joe Sacco (que usa los trucos de la historieta autobiográfica para hacer periodismo investigativo) y otra muy diferente es leer la vida de gente cuya su rutina se reduce a salir a tomar algo, sentarse en un tablero y hacer reflexiones irónicas y/o cargadas de referencias pop sobre la vida (como son el 90% de las historietas autobiográficas ). Todo eso lo puedo hacer yo y ver yo con mi vida, gracias.

Una vez dicho esto, se podrán imaginar que este libro no era particularmente de mi interés. Tal vez lo más curioso era que, por lo menos, el autor vivía un cambio profundo  (de lugar, de vida, de país… cosa que no es fácil, se los digo por experiencia). Y el resultado es… bueno lo que uno descubre es que el mito de “Israel-el-estado-rodeado-por-vecinos-que-lo-quieren-matar” es en parte cierto y en parte falso. Si, hay controles y la sensación que hay en el trasfondo cotidiano algunas cosas de seguridad que uno no vive en lo cotidiano. Pero que, en el 90% de los casos eso es básicamente un incordio, no un problema peligroso. Y que los israelíes tienen una vida tan aburrida en prometido como nosotros.

No es que esté mal el libro: Janchez hace divertidas las anécdotas, hace observaciones afiladas y tiene un estilo impresionista y simple (se nota su admiración por Angel Mosquito en sus trazos). Solo que no soy el lector que busca. No me interesa lo que cuenta por lo que dije arriba del género. Denme historietas irreales. O historietas reales donde me digan lago más que “soy un tipo de treinta de clase media occidental que no sabe que hacer con su vida”. Solo para evitar la redundancia con mi vida cotidiana.

El jugador de la vida

El jugador de la vida

Autor: “Arnaldo Visconti” (seudónimo de Pedro Debrigode)

Colección: El Halcón nº 1

Edita: Bruguera, Barcelona, circa 1946

 

Uno sabe que una serie va a ser peculiar cuando empieza con el asesinato de su héroe titular. Porque así empieza esta historia: en la Carolina del Sur al borde de la guerra civil entre la Union y la Confederación estadounidenses (literalmente con la guerra a punto de estallar) uno asesinos emboscan y matan a El Halcón, héroe enmascarado que había venido defendiendo a los pobres y los desprotegidos. Pero el Destino juega con cartas extrañas y ahí aparece Rock Gambler, traficante de armas cínico, irrespetuoso y deslenguado pero, en el fondo, con un corazón de oro. Que vista la situación no duda en mandar al otro mundo a los asesinos y, tras descubrir la verdadera personalidad del Halcón  (un joven caballero sureño llamado Michael Ryan que ha hecho esto  por sed de justicia) irreflexivamente decide continuar con su legado.

Y justamente es Rock Gambler y su compleja caracterización lo que sostiene esta historia. Uno tiene la sensación que a Debrigode lo que realmente le interesa es explorar a ese personaje complejo y contradictorio. De hecho la actividad enmascarada de éste se resume a una escena bastante sosa, casi para justificar el nombre de la serie. No sería improbable que la idea del personaje fuera una imposición editorial porque Bruguera quisiera tener una competencia con el exitoso El Coyote que en esos años sacaba Clíper.

Si es así, la verdad el resultado no podía ser más diferente. Frente al aristócrata moralmente claro que se disfraza de filósofo cínico que propone José Mallorquí, Debrigode opone un personaje desengañado que tiene arranques de nobleza. A las cuidadosamente estructuradas novelas del Coyote, aquí tenemos una historia mucho mas libre, que, de hecho, termina con demasiados puntos del argumento no resueltos, claramente pensando en el tomo siguiente. Frente al hombre de familia que es César de Echagüe, Rock Gambler es evidentemente un mujeriego simpático pero que resulta incapaz de pensar en compromiso a largo plazo.

El resultado final es a la vez fascinante y frustrante. Fascinante porque uno se queda con ganas de qué hará luego alguien tan inexplicable como mister Gambler. Frustrante porque realmente esta novela no resuelve nada, obligando a leer la siguiente. Por suerte tambien tengo el tomo siguiente, pero si no se dispone, uno puede sentirse con ánimo de dejar la serie.

Próxima reseña, la segunda novela de la serie. No se la pierda.

 

Revistas argentinas de ciencia ficción

Revistas argentinas de ciencia ficción

Autor: Carlos Abraham

Colección: Sentidos del libro

Edita: Tren en Movimiento, Temperley, 2013

 

“La literatura nacional (argentina), pese a su extensión y riqueza, encierra muchas áreas desatendidas por la crítica especializada y que no cuentan siquiera con una monografía que ilumine su historia” es la primera frase de este libro de Carlos Abraham. Una gran verdad: la literatura argentina (e hispanoamericana en general) parece decidida a olvidar de su estudio a innumerables textos, considerados “menores” y, por ende, no canonizados en las historias de la literatura que se enseña en colegios y carreras universitarias de Filosofía y Letras. En general la crítica literaria tiene poco trabajo de campo, prefriendo guitarrear – cuando se meten con este tipo de literatura – basándose en un corpus relativamente pequeño y fragmentario, donde muchas veces son usados más que nada como ejemplos justificadores de las hipótesis de fondo del trabajo, antes que tratar de generar descripciones y tendencias históricas de esos procesos con corpus lo más completos posibles.

(NO, no es que esté en contra del desarrollo de trabajos teóricos sobre determinados aspectos de las culturas de masas literarias –o de otra índole , ya que estamos. El problema es que, al no haber una base de datos profunda para contrastar no solo la existencia de esa publicación y sus condiciones de producción, sino también sus condiciones de circulación y recepción en el momento de su aparición, el autor puede sacarse cualquier conclusión de la manga. No es lo mismo la influencia cultural que en un momento determinado  pudo tener un escrito salido en una editorial pequeña y poco conocida que un escrito que saliera en, digamos, la editorial Tor. La construcción exhaustiva de trabajos referenciales – como los que hace Abraham – deberían ser prioritarios para poder contrastar estos tipos de análisis y ver si sus hipótesis se sostienen o no)

Carlos Abraham, por suerte, es un autor que basa sus obras en el trabajo de campo, haciendo trabajos lo más detallados posible sobre algunos aspectos de la cultura popular. Ya había escrito un profundo estudio sobre la editorial Tor y ahora se despacha con un trabajo riguroso y exhaustivo sobre todas las revistas argentinas dedicadas a la literatura de ciencia ficción y fantástica. Evitando los lugares comunes, las creencias preestablecidas, combina en la obra la actitud obsesiva del coleccionista compulsivo (capaz de perseguir por años un ejemplar en particular) con el estilo analítico del profesional universitario. El resultado es un producto ameno de leer, instructivo en la génesis, desarrollo y desaparición de las revistas del género y que aporta información nueva.

El libro básicamente se compone del análisis capítulo a capítulo de todas las revistas del género publicadas en Argentina. Están los obvios capítulos dedicados a las revistas más conocidas (Mas allá, Narraciones terroríficas, El Péndulo) pero, en mi opinión personal, los capítulos más interesantes son los dedicados a esas revistas de segunda fila que no han trascendido. Por ejemplo el dedicado a La Novela Fantástica, efímera y oscura revista de 1937 que sería hasta el momento la primera revista dedicada exclusivamente a la ciencia ficción en español (lo que obliga a reescribir los libros de historia del género). Abraham no solo deja constancia de su existencia, no solo hace un paneo por sus contenidos: se toma el trabajo de hablar de su creador y llega a entrevistar a la hija para tener una idea de quién era. O el capítulo dedicado a Pistas del Espacio, la revista de ciencia ficción ocn la que editorial Acme sale a reemplazar a Mas Allá, donde Julio Grassi, responsable concreto en lo editorial de la revista, cuenta su experiencia con lujo de detalles (Por cierto, la editorial Acme se merecería un estudio enjundioso y Abraham sería, en mi opinión, el tipo que debería levarlo a cabo). O la bizarra vida editorial de la no menos "freakie" Umbral tiempo futuro. Capítulos como esos hacen de este libro un texto indispensable para el que esté interesado en saber más sobre cómo se difundió la literatura de este género en Argentina.

Los libros de Abraham se convierten poco a poco en libros indispensables para desbrozar el camino lleno de estos árboles muertos con mucha tinta que reseñamos acá. Ojala haya más trabajos así. De entrada, se le agradece a la gente de Tren en movimiento en sacar libros así. Y ojalá que el ejemplo lleve a más gente a hacer ese trabajo de campo necesario para saber más de la narrativa popular en español.

¿Es redundante decir que , si pueden conseguirlo, vayan corriendo a comprar este libro, no?

JLA: JUSTICIA

JLA: JUSTICIA

Título original: JLA: Justice (2010)

Autores: Jim Krueger (guión) y Alex Ross (dibujos)

Colección: Booket

Edita: Planeta, Barcelona, 2010

 

Por un lado, muchos villanos comienzan a trabajar mancomunadamente para mejorar la calidad de vida de la Humanidad. Por otro lado, la Liga de la Justicia de América comienza a ser atacada solapada y sutilmente, generando desconcierto y disensión entre ellos. Desde ya hay un plan detrás, un plan complejo y maquiavélico diseñado pro alguno de los rivales más poderosos de los héroes. No puedo contar más porque sería sopa fría, la verdad…

Si alguno está preocupado pro saber exactamente donde entra esta historia en la continuidad oficial del Universo Dc, les diría que no se calienten demasiado. Evidentemente está ubicada probablemente en algún momento de lo publicado durante la década de 1970, con la lista de héroes clásicos perteneciendo al supergrupo (Superman, Batman , Mujer Maravilla, Flash/Barry Allen, Green Lantern/Hal Jordan, Hawkman/Katar Hol, etc) y con los villanos que recuerdan mucho a la Legión del Mal de los Super Amigos. De hecho, como dijo un amigo , tal vez sea más entretenido pensar que es una suerte de versión “seria” de este grupo animado antes que de la Liga “oficial”. En síntesis, lo que quiere hacer en la historia Jim Krueger es algo “clásico”, donde los héroes osn buenos y los malos malos, sin medias tintas.

Si a eso le sumamos el fotorealismo de Alex Ross en cada página, la palabra que conseguimos al final es “épica”. Una historia donde el destino del mundo está en juego, donde todo es mas grande que la realidad, donde se puede volar más rápido que la luz, o derribar edificios de un solo golpe. Una de superhéroes bien contada, que empieza y termina. Una novela gráfica en todo el buen sentido de la palabra. NO, no cambia el género ni las convenciones de la historieta, no es rompedora. Pero es una obra sólida que no se deshace en ningún momento. Muy disfrutable la verdad.

 

Editorial: ¿Por qué un blog?

Editorial: ¿Por qué un blog?

Hace poco alguien me preguntaba ¿por qué un blog? ¿Cuándo puedes transmitir la información de maneras mas inmediatas via facebook Twitter y demases instrumentos de Internet 2.0 o 3.0, ¿por qué mantener algo tan anticuado comparativamente como un blog?

No fue una mala pregunta. Llevar un blog (y mas por tantos años) implica que cada tanto hay que preguntarse el para qué.

Y la respuesta que me sale es que un blog es trascendente justamente cuando NO es inmediato. El Facebook , el Twitter implican responder al momento, sin mucho margen para reflexionar. Tarde otemprano una reflexión en estos espacios se agota, se olvida, se abandona. Y además hay que responder velozmente, a veces sin tener la mejor información, con un ejercicio de opinología veloz que muchas (demasiadas) veces degenera en casi un festival de puteadas y egos heridos porque nadie quiere bajar un cambio.

En cambio , el blog da el espacio para crear un texto largo, escribir, reescribir , ver que uno dice o no. Para dar una opinión pulida y mas profunda sobre algo en síntesis, sin perder tambien esa inmediatez que uno no consigue si se escribe un artículo largo o un libro.

Justamente que no sea ni muy inmediato ni tan mediado, ni muy profundo ni tan leve, que al menos a mí me funciona fantástico. Hay una satisfacción inmediata en escribir sin fronteras, sin límites mas que los que uno se impone, pero además uno tiene la posibilidad de escribir con una cierta calma lo que dice. Me gusta escribir sin fronteras peor no entrar en un concurso de ver quien responde más rápido ni mas efusivamente.

Es por eso que sigo bloqueando. Es por es por lo que este blog continúa. Es por eso porque todavía me enamora este formato. Es por eso que recomiendo que hoy por hoy, si quieren expresar algo profundamente, algo que les salga de las entrañas, haganse un blog. Si tenés algo que decir , es para mi gusto el mejor camino sin filtros hoy día.

 

Lo que no importa está acá

Lo que no importa está acá

Autor: Gustavo Sala

Edita: Moebius, Buenos Aires, 2013

 

Gustavo Sala es un rocker de alma.

Y tiene un ojo crítico para desactivar la grandilocuencia farandulera a golpes de absurdo que ya se podía ver desde sus comienzos omco fanzinero.

Que la revista Rolling Stone argentina lo pusiera a hacer chistes sobre ambos temas fue una decisión correctísima, porque Sala parió una sucesión de chistes uno más salvajemente lúcido que el otro. Ningún ícono “curtural” queda a salvo de sus dardos (sino fíjense en le Charly “Totoro” García de la tapa, ironizando con este anciano gordo que ha ocupado el lugar del Héroe Rockero de Argentina, ese al que todos apostábamos que se moría en una sobredosis), pero todo escrito con tanta gracia que es imposible no reírse.

Que Moebius haga una selección de sus chistes y lo aderece ocn otros que hizo Sala especialmente para el libro, es un acierto total. El efecto acumulativo de leer todos lso chistes de Sala desemboca en la carcajada perpetua del lector. Eso sí si es de ofensa fácil, evítelo. Gustavo puede ser vulgar, salvaje y políticamente incorrecto en unos niveles dignos de Vuillemin.Si se va a poner a denunciarlo porque un chiste le afectó su conciencia moral, NO LO COMPRE. Está avisado.

Además los chistes necesitan de la referencia del personaje que se está satirizando. Algunos (Los Beatles, Kiss, Amy Winehouse, etc) los conocerá mucha gente peor hay una gran cantidad que dependen de la fauna rockera y mediática argentina para entenderse.

Pero si usted puede superar ambos inconvenientes, vaya y cómprese este libro porque se va a reir mucho, pero mucho. Gustavo es de los mejores humoristas contemporáneos de la Argentina. Y en este libro vuelve a dar cátedra.

El corso maldito

El corso maldito

Autor “Arnaldo Visconti” (seudónimo de Pedro Debrigode)

Serie: El Pirata negro nº 9

Edita: Bruguera, Barcelona, circa 1946

 

Mis amigos españoles me hablan maravillas de Pedro Debrigode. Para muchos, dentro de la literatura pulp hispana, está solo por debajo de José Mallorquí a la hora de contar una buena historia de aventuras. Y más de uno de ellos considera que esta serie está entre sus mejores obras. Aprovechando que encontré por casualidad (y a un precio que no voy a decir para no generar envidias entre otros coleccionistas) un par de las novelas del personaje, me puse a leer esta historia.

El título es engañoso porque no se refiere a un corsario bajo una maldición (y menos a una fiesta de carnaval malefica, peor eso era mas inesperado) sino que se refiere a lo que ocurre en la isla de Córcega, que es una posesión recién conseguida del reino de Francia y está en una efervescencia rebelde. Y un exiliado en Nápoles, Pietro Fonti, está planeando generar una rebelión por todo lo alto. Por suerte el gobernador de la isla tiene un amigo, Carlos Lezama, también conocido como el Pirata Negro, que se ha decidido a resolver el problema del signore Fonzi metiéndose en plena Nápoles para detener su planes. ¿Me olvidé decir que Fonzi tiene en estos momentos a Nápoles bajo su siniestro control y hay una joven noble napolitana que caerá rendida ante nuestro pirata?

Más allá de lo inesperado que es encontrarme con un pirata que apoye el colonialismo frente a un rebelde independentista (si bien sea sustentado por el hecho que es amigo del gobernador francés y que el jefe independentista sea básicamente un tirano de acuerdo a la historia... pero bueno, estamos en pleno franquismo lo que hace claramente que hablar a favor de la rebelión contra el poder algo muy bien visto por las autoridades censoras), no puedo negar que el relato resulta entretenido. El Pirata Negro es de esos típicos aventureros sonrientes, astutos y osados en el molde clásico. Se deja disfrutar mucho, aunque es no llega a ser el prodigio narrativo que es habitualmente una narración de Mallorquí.

Hay otra novela mas de esta serie en la lista de cosas a leer (y varias otras cosas del señor Debrigode también). Después de leer esta novela, quedan en la lista de “despachar en un plazo relativamente corto”. Prometo volver a enfrentarme al Pirata Negro a la brevedad. Va a ser un placer.

 

El Rey Cobra

El Rey Cobra

Título original: King Cobra , 1933

Autor: Mark Channing

Colección: Biblioteca Oro (serie Azul)

Edita: Molino, Buenos Aires, 1939

 

Había leído una novela de Channing (reseñada en el Especial Peligro Amarillo de este blog y recopilada en mi único número del e-zine) y me había resultado interesante. Conseguí otra más y ahí me puse a leerla. Y me encontré con una historia de aventuras y civilizaciones perdidas bien entretenida.

Estamos en Yanistán, uno de los pequeños reinos hindúes que eran parte de la compleja estructura política que constituía la India gobernada pro el Imperio Británico. Allí se encuentra estacionado el mayor Colin Gray, el mismo protagonista de la novela anteriormente reseñada (que, si bien se publicó luego de esta, dentro de la cronología interna puede ser anterior). Hay rumores de rebelión en la zona, que parecen ser aigtados por un carismático y salvaje bandido local conocido como el Rey Cobra, recientemente capturado y a punto de ser ejecutado. Pero las cosas no salen como parecen: el rey Cobra se fuga de prisión, el residente británico (una suerte de contacto entre el gobierno británico y el gobierno local) de Yanistán es envenenado y su hija raptada por los rebeldes. Y, como Gray está muy interesado por Diana, la hija raptada, se lanzará a tratar de rescatarla. Aunque en el cmaino es capturado porque su guía, un mongol enano llamado Khoon, es en realidad aliado del Rey Cobra en un plan mucho más complicado del que parece a primera vista.

Y es que Khoon y el Rey Cobra están obedeciendo a un misterioso personaje llamado el Encapuchado que parece estar trabajando con una potencia extranjera para fomentar esta sublevación, a fin de debilitar la Imperio. Es por eso que los montañeses del rey Cobra y los mongoles de Khoon – que desconfían del otro grupo – trabajan unidos. Le toca a Gray liberarse, detener la conspiración y evitar que Diana se convierta en la nueva esposa del harén del Rey Cobra (como corresponde a toda buena dama en peligro).

Pero, para que esto no sea una mera aventura histórica, Channing agrega unos detalles exóticos interesantes. Por un lado la fortaleza en la montaña del rey Cobra parece ser el palacio original del Preste Juan, ese rey cristiano mítico de la Edad media con un reino fabuloso en algún lugar que ningún cronista conocía. Por otro están las apariciones fantasmales de un extraño gurú hindú (con una esvastica en el pecho.. bueno recoremods que en esa época erau n símbolo de la fertilidad hindú, no un símbolo nazi) que da pistas para que puedan tanto Colin como Diana sobrevivir.

El resultado final es una novela que no escatima en acción ni en situaciones exóticas, villanos deleznables y acción constante. Mi única queja es el deux ex machina por el que toda la conspiración parece hundirse (¿Un terremoto! ¡Vamosss…! ¿Algo más creativo no podía ser?) y donde el mayor Gray cumple dignamente su papel de heroe defensor de la civilización occidental sin ser particularmente racista. Probablemente el ritmo veloz de la novela sea que fuera originalmente publicada serializada en un diario británico y, tras su éxito, fue recopilada en un libro.

Hay dos novelas más de Colin Gray, una de las cuales fue editada por Molino (la otra está inédita en español). No estaría mal que alguna editorial recuperara estas novelas, que no desmerecen en calidad a las historias aventureras de tipos como Kipling, Rider Haggard, etc. Mientras tanto, seguiremos persiguiendo la otra novela que me falta…

El año de Dracula

El año de Dracula

Título original: Anno Drácula (1992)

Autor: Kim Newman.

Edita: Timun Mas, 1999

 

¿Por qué Drácula repentinamente decidió irse a Inglaterra en la novela de Bram Stoker, cuando quedándose en su tierra natal no le hubiera pasado nada? ¿Qué plan tenía? ¿Y qué hubiera pasado si Van Helsing y su grupo no lo hubieran detenido?

Esas respuestas las de Kim Newman en esta novela. ¿Cuál es el plan del conde transilvano? Vampirizar a la reina Victoria y convertirse en el Príncipe Consorte de Inglaterra. ¿Qué pasaría si consiguiera concretar su plan? El imperio más poderoso del mundo reconoce repentinamente la existencia de los vampiros, que adquieren una nueva, pública y no siempre armoniosa coexistencia con los humanos, bajo el gobierno de un tipo cuya anterior experiencia de gobierno se caracterizó fundamentalmente por empalar opositores… algo que no le cae muy bien a mucha gente, tanto humanos como vampiros.

En ese ambiente donde las cosas están a punto de explotar, un asesino comienza a hacerse notar en el barrio de Whitechapel. Un asesino de prostitutas vampiro que disfruta de una venganza personal contra los chupasangre.

Para enfrentar la situación, el jefe del Diógenes Club (la informal “agencia de inteligencia” del Imperio en esos años), Mycroft Colmes, solicita a uno de sus miembros, Charles Beauregard, investigar el caso. Junto a Geneviève Dieudonné, una antigua vampiro que intenta paliar los desastrosos cambios que la creación descontrolada de nuevos vampiros están trayendo para todos, comienzan a desvelar una trama que conecta a Jack el Destripador con los antiguos miembros del grupo de Van Helsing.

Una de las cosas más entretenidas de esta novela es como Newman crea ese universo victoriano paralelo, donde se cruzan personajes de ficción de obras clásicas de la época como “Drácula”, las historias de Sherlock Holmes, “El vampiro” de Polidori (su protagonista, lord Ruthven, es aquí un vampiro político, sinuoso y manipulador), las novelas de Fu Manchú, etc., junto a personajes reales (Jack el Destripador, William Morris, Darwin, etc) conformando un tapiz donde muchas veces el chiste es pillar la referencia.

Otro de los puntos interesantes es ver la relación entre John Steed y Emma Peel… perdón, entre Charles Beauregard (tan formal, comedido y educado) y Miss Dieudonné (tan despreocupada de formalismo como lo puede ser alguien que viene sobreviviendo desde hace siglos a las persecuciones y general estupidez humana) para ver como van construyendo una relación entre ambos. Vamos, lo que nunca pudimos ver en la serie del 60.

Finalmente, es interesante ver como Drácula es , al igual que en la novela original, más una presencia que abarca toda la historia como un virus maligno que un personaje que actúa directamente en ella –excepto al final-. Una especie de demoníaco corruptor de todo, que hace que todo vaya para peor.

Reconozcamos que, si uno no es entusiasta de ese juego referencial literario (no por nada Newman reconoce su deuda con el Tarzan Alive! De P.J. Farmer), se pueden ahorrar la lectura del libro. En sí , hay obras que exploran de maneras mucho más originales a los vampiros o los crímenes de Jack el Destripador.

En un sentido, “Anno drácula” es básicamente una buena ficción, que entretiene más por la referencia a otras obras literarias  que por el argumento en sí. Kim Newman no es el primer ni el último autor que juega este juego y, si al lector le gusta este tipo de obras (mi caso), se va a hallar con un universo alternativo muy entretenido. Pero el relato en sí, despojado de sus referencias, no es nada del otro mundo. Pienso seguir leyendo los relatos del señor Newman, pero solo porque me gusta le juego que propone. Están avisados…

El caso del canario cojo

El caso del canario cojo

Titulo original: The case of the lame canary, 1937

Autor: Erle Stanley Gardner

Colección: Caimán nº 8

Edita: Diana, México, 1961

 

Perry Mason generalmente no se interesa por los casos de divorcio. De hecho la que lo contacta es la hermana de quien está pensando divorciarse. Pero le resultó curioso que la que venía a hablar del tema viniera con un canario cojo de su pata derecha. Esa curiosidad le lleva a meterse en el caso de divorcio por infidelidad complicado con dineros que, a poco de andar se convierte en en asesinato y, a poco de empezar a investigar, comienza a complicarse aún más todavía en una trama que tiene más vueltas de las imaginables.

Cuando uno se acerca a una de las novelas del personaje creado por Erle Stanley Gardner sabe que hay varias cosas que siempre encontrará allí. Por un lado, Mason es un abogado absolutamente dispuesto a caminar por el filo de la legalidad con tal de conseguir que su cliente resulte inocente. Segundo, su secretaria, Della Street, es ayudante, confidente, contrapeso moral cada tanto y (si uno quiere leer entre líneas) muucho más que una mera secretaria para Perry. Uno sabe también que el relato podrá ser complicado, enrevesado y complejo pero la explicación final NUNCA suena traída de los pelos sino que se desarrolla con lógica del oque pasó. Lo que es claramente uno de los puntos que hicieron que Perry Mason fuera tan exitoso, cubriendo un terreno que iba a mitad de camino entre la novela negra y el relato policial más clásico. Así que , si son de esa gente que cree que leer Agatha Christie se hace un poco monótono y frío pero les gusta un misterio más convencional que se necesite resolver con algo más que aporrear personas (a lo Mike Hammer), esta novela es para ustedes.

 

Historias del olvido

Historias del olvido

Autores: Guión de Luciano Saracino y Javier de Isusi, dibujos de varios autores.

Edita: W Editores, Buenos Aires, 2013

 

Tenía originalmente pensado una gran introducción a esta reseña, que me había imaginado en mi mente. Pero se me olvidó.

Lo que engancha perfectamente con esta novela gráfica.

Historias del olvido habla justamente de la labilidad de la memoria, de cómo se nos pierde sin darnos cuenta, de como la reconstruimos una y mil veces, del recuerdo como algo flexible y variable. Bajo trasfondos mas o menos fantásticos (un pueblo donde la gente olvida cosas, palomas que parecen llevarse recuerdos, gente olvidadiza la extremo, relaciones de amistad a algo profundo con los cambios de memoria, etc) lo que Luciano Saracino y Javier de Isusi hacen es meternos en uno de los temores ocultos que mas nos asustan a cada uno: ¿qué pasa si lo que yo creía que fue no era? ¿Y cómo me daré cuenta de eso?

Otra cosa inteligente ha sido la construcción de la historia, compuesta con dos o tres historias paralelas que van dando un paneo general. Eso permite que haya varios dibujantes diferentes contribuyendo para un proyecto que (sospecho) no debe haber pagado adelantos (lo que permite un compromiso más simple de su parte) pero que no es meramente una antología de historias sino una obra cerrada en si. Un trabajo estructural que tiene sus bemoles y que los guionistas logran realizar perfectamente.

Y el elenco de dibujantes es excelente. David Rubin, Paco Roca, Manu Ortega, Infame & Co, Danimaiz, David Lafuente, Leticia Ruifernandez, Abril Barrado y Alex Orbe contribuyen cada uno con sus estilos personales a darle a la obra un tono variopinto y mezclado que ayuda en mucho al resultado final.

Definitivamente, Historias para el olvido no debería dejarse pasar si uno es lector del buen comic. Profunda, reflexiva, poética pro momentos. Me encantó. Disculpen el chiste obvio, pero no se olviden comprarla.

Enfermito. El humor insano de Gustavo Sala

Enfermito. El humor insano de Gustavo Sala

Autor: Gustavo Sala

Edita: Ril, Santiago de Chile, 2013

 

Fuera de las fronteras argentinas, Gustavo Sala y su humor demencial, escatológico y disparatado es poco conocido. Mas allá de unas colaboraciones parala revista española  El Jueves y algo editaod en Uruguay, el resto del mundo desconoce su humor.

Ahora, al menos, Chile es otro país que puede ver su trabajo. En ese sentido, Enfermito es un gran sampleo por el universo de Sala. De hecho hay cosas que vienen de los años de su fanzine Falsa Modestia.

La verdad que puedo agregar de Gustavo que no haya dicho muchas veces. Para mí es uno de los humoristas más interesantes que ha dado Argentina en los últimos quince años. No esperen apuntes cotidianos a lo Maitena o poesía reflexiva a lo Liniers (por nombrar otros dos humoristas que mas o menos por esos años se hicieron famosos): Sala tiene un humor surrealista, escatológico, absurdo y políticamente incorrecto. Si usted es del os que se ofende fácil, no se acerque a este libro, porque puede hallar material para dos o tres juicios (lo que, en mi libro, lo convierte en un soberano tarado. ¿No se da cuenta que es un chiste?). Pero si no le afecta la corrección política, se va a encontrar riéndose a carcajadas en dos segundos, créame.

O sea, si es de los que se ríen con cosas... bueh, enfermitas… este es su libro. Sala es un procer del humor, créanlo.

 

Revista Cthulhu nº 10

Revista Cthulhu nº 10

Autores: varios

Edita: Diábolo, Madrid, 2013-11-28

 

Vamos aclarando que con esta revista tengo conflicto de intereses. Es que una historieta dibujada por Edu Molina y guión mío aparece en este número. Así que esta reseña tomenla con este dato por delante.

Una vez dicho esto, realmente es muy bueno volver a ver una revista de antología que venga perdurando en el tiempo como esta. Bien hecha, con un papel muy bonito, prolija edición. Me recordó en un punto la exquisita edición de la Taboo de Stephen Bissette (para mí es un elogio si haces revistas de terror). Puedo decir que, al menos nuestra historieta no desmerece nada como quedó publicada respecto al original.

Yendo a los contenidos, pasa lo que pasa en toda antología: hay cosas mejores y cosas peores. Vayamos al detalle.

Empezamos con la única historieta seriada de la revista, una adaptación de Herbert West, Reanimador, de H. P. Lovecraft escha íntegramente por Santipérez, un dibujante con un trazo que me recuerda al mejor Bernie Wrighston. Clásico, sólido, detallista, es un gran comienzo de la revista.

Otra adaptación, esta vez de la historia “Ellos” de Runyard Kipling por Yago, le sigue. Una típica “ghost story” de principios del siglo XX, de fantasmas amables y casas de campo británicas, dibujada con un estilo sintético y levemente “cartoony”

“l hombre que me apuñaló en Venecia” de Edgar Max es el típico enfrentamiento con el doble para resolver el pasado. Bien contado, bien dibujado.

“Eso” de Manuel Mota es una anécdota breve de sexo con Algo Que No Debería Existir (Y Menos Follar) que parece dibujada para una revista italiana tipo Sukia.

Sobre “La Cantante”, escrita por servidor y dibujada por Edu Molina no puedo opinar. Solo puedo decir que lo que hizo Edu con mi guión fue MEJORAR profundamente lo que había escrito. Y yo me encuentro profundamente satisfecho con su trabajo… Ahora por la historia en particular, evalúen uds.

“El hombre maldito” de Fátima Fernandez e Ismael Canales tiene un dibujo ahí nomás y una anécdota mínima que realmente no llega a mucho. Definitivamente, no me gustó.

“El sueño del señor Rodriguez” de Roc Espinet, por el contrario, es un hallazgo. Dibujado con un estilo que me recuerda mucho a Johan Sfar, la anécdota puede ser mínima pero está contada con una gracia maravillosa.

“Pasan cosas raras en Dunwich” de Alex Ogalla y Ernest Sala es un relato clásico del género, giro irónico incluído, efectivo y bien dibujado.

“La serpiente blanca” de Raulo Cáceres, es otro de los relatos maravillosos de este ejemplar. El uso de la leyenda de Medusa reconvertida en un relato de amor imposible en solo ocho páginas es brillante. Todo con el estilo barroco al que Raulo acostumbra a dibujar.

“como escribir una historia lovecraftiana2 es un desguace en dos páginas y en clave humorística de los relatos de don Eich Pi El. Graciosillo.

“Dagón” de Ariel Diaz es otra adaptación (y van…) de Lovecraft. ¿No es hora de declarar moratorias en las adaptaciones de sus relatos? Y tiene un dibujo expresionista muy lindo peor es una mala historieta. O sea es más un relato ilustrado, un conjunto de viñetas ordenadas por el resumen del relato. Nada de globos de texto, nada de personajes que reaccionen. Solo muchas viñetitas hiladas y soportados por una narración en bloques. Eso sí, lindas las viñetas, muy expresionistas ellas.

“Vidente” de Cabhur y Sirelion empieza generando confusión y jugando con los clisés de los relatos de terror, pero termina cerrando todo en una resolución que hace que todo sea un mecanismo de relojería.

“Niara y Menelik” de Damián Connelly y Gerardo Baró es otra de las joyas del número. NO desmerecería la historia en las páginas de la Creepy clásica, realmente.

“Girtando el silencio” de Bascoy tiene el problema de competir temáticamente con la historia de Raulo, lo que le hace perder en comparación. Es una anecdotita pequeña muy bien dibujada.

El relato “Perros perdidos” de José Tamparillas (que es un cuento, no un comic) pone dentro del género el ambiente urbano popular de las malas edificaciones urbanas y lo torna en un relato genuinamente desasosegante.

Finalmente Angel Rodríguez aporta con una página que es mas un chistecito que otra cosa.

El balance es promisorio. Ctulhu es una revista de antología que creo que vale la pena seguir si uno es fan del género del terror.

Una bala para cada hombre

Una bala para cada hombre

Autor: “John F. Abbott” (seudónimo de Juan Francisco Abad Fornieles)

Colección: Bisonte nº 292

Edita: Bruguera, Barcelona, 1953

 

El argumento del “jinete vengador misterioso que llega a arreglar injusticias al pueblo” es uno de los más usados en el género del Oeste, estando ya a un paso de convertirse en un subgénero por derecho propio. Innumerables películas, historietas y reatos usaron este cliché. Uno de ellos es esta novela.

Resulta que Jones Will fue muerto en un incendio provocado pro el principal estanciero de la zona, por resistirse a sus intentos de controla el lugar, auxiliado con el sheriff local. Pero años después, un misterioso forastero pasa por allí, clavado físicamente al muerto. Y todos creen que es el finado, que sobrevivió a incendio y que viene dispuesto a vengarse de quienes lo ataron y poner justicia en le lugar. Y en realidad, el personaje es un misterioso fugitivo que nada que ver  con el muerto pero que, dada la amabilidad con que lo reciben, decide hacerse pasar por éste y proteger a su familia adoptiva.  Y lo hace con unos métodos brutales que parecen realmente de bandolero, solo que, como el es el bueno, todo está permitido porque la Justicia está de su lado, que no la Ley.

Como verán, el cóctel no es muy diferente a muchas otras historias del Oeste que conocemos y el estilo del autor, uno de esos novelistas a destajo que la España de mediados de siglo produjo en gran cantidad gracias al fenómeno de los bolsilibros, tampoco aporta demasiado. Más allá de lo implausible que nadie sepa que ese tipo no es quien todos creen que es, la novela funciona efectivamente. Tampoco es un clásico, solamente una historia para pasar el rato, efectivamente escrita pero poco más.

O sea un ejemplo típico de literatura desechable.

 

La tigresa y yo

La tigresa y yo

Autor: “Keith Luger” (seudónimo de Miguel Oliveros Tovar)

Edición original: 1961

Serie: Servicio Secreto nº 1237

Edita: Bruguera, Barcelona, 1974

 

Red Wyler es un detective privado de esos duros e incorruptibles que recibe le encargo de averiguar si están chantajeando a Perla Benson, la hija del magnate de la prensa Frederic Benson. Por supuesto , lo que parece laog tan simple ocmo un seguimiento y vigilancia se convierte en un lío fenomenal que involucra gangsters, información comprometedora y un oscuro dato del pasado que involucra al pasado de Perla Benson y su ascendencia.

Keith Luger era uno de los escritores incombustibles de los bolsilibros españoles de las décadas que van de 1950 a 1980, escribiendo novelas populares con una frecuencia y profeisonalismo envidiables (leo que llegó a escribir ocho novelas al mes), mayoritariamente del Oeste y policiales. Como es esta novela.

¿Y tras leerla, que puedo decir? Que es efectiva, se lee rápido pero definitivamente no es un clásico del género policial. Tampoco es que nadie pide eso. Es lo que es: lectura pasatista bien escrita. Y ahí nos quedamos.

 

Walt Disney’s Mickey Mouse Color Sundays vol. 1: Call of the Wild

Walt Disney’s Mickey Mouse Color Sundays vol. 1: Call of the Wild

Autor: Floyd Gottfredson

Colección: The Floyd Gottfredson Library

Edita: Fantagraphics, Seattle, 2013

 

Apenas me había asomado al trabajo de Floyd Gottfredson en las páginas de la antigua Historia de los Comics de Toutain pero siempre oia decir buenas cosas de él. Y se dio que, por esas cosas del destino, a mi amigo Diego Jourdan le enviaron dos copias de esta recopilación de las primeras páginas dominicales de Mickey hechas por Gottfredson y me regaló una. Así que me senté a leer el libro.

Y.. ¡Qué hallazgo!

Aquí no hay seriales aventureros larguísimos como en las tiras diarias que por esos años también hacía Gotfredson con Mickey, sino más bien anécdotas cómicas cortas o historias que se terminaban en relativamente pocas planchas. Teniendo esto en cuenta, hay que ver la destreza con la que cuenta cada historia, con que engañosa simplicidad desarrolla las situaciones. Parece tan simple… y después cuando uno quiere repetirlo, descubre que, no, tiene una complejidad asombrosa esa simpleza.

Y lo mismo pasa con el dibujo. Parece sencillito, pero el trazo es de una solidez y una habilidad compositiva que atemoriza. Miren el uso de las líneas cinéticas que hace. Y me pregunto si el abuso de las gotas que salen de los personajes sean un antecedente indirecto del uso que hacen de ese recurso en los mangas. Lo que no sería raro sabiendo que Tezuka era fan de la animación y muy probablemente haya visto las tiras de Mickey en los diarios cuando era niño.

Ojo, no esperen aventuras que van a cambiar la vida. Los guiones, como dije, varían entre pequeños desencantos cotidianos protagonizados por un Mickey que todavía es un personaje antes que una mascota corporativa. Un Mickey resolutivo e inteligente, pero también propenso a las jugarretas con sus amigos.

También resulta muy interesante ver la evolución en las páginas de los secundarios de Mickey. Mientras que en un principio Clarabella Cow y Horace Horsecollar osn casi los partenaires privilegiados de Mickey y Minnie, poco a poco van desapareciendo con la aparición de Goofy (muy interesante seguir su evolución) y, sobre todo, la de Donald.

Y la edición de Fantagraphics, un lujo tanto por el trabajo de remasterización de las tiras como por todos artículos investigativos sobre Mickey (el artículo sobre la influencia de Disney en Italia vale solo el libro)

En síntesis, un libro excelente por dónde se lo mire. Si pueden comprárselo, háganlo. Vale la pena.

 

La reconquista de Mompracem

La reconquista de Mompracem

Título original: La riconquista del Mompracem (1908)

Autor. Emilio Salgari

Serie: Los piratas de la Malasia nº 8

Colección: Lo mejor de Emilio Salgari nº 19

Edita: Nauta, 1972

 

Finalmente, tras años de exilio, Sandokan y los viejos Tigres de la Malasia se disponen a recuperar SU isla, Mompracem, de las manos del sultán de Varauni, que la recibiera después de que la alianza entre varias potencias coloniales corrieran a los piratas , allá por el libro Sandokán.

El problema es que, sencillamente, el plan no se sostiene de ninguna manera. Todo depende que Yañez se haga pasar DE NUEVO por OTRO DIPLOMATICO BRITANICO mientras mina secretamente las bases del gobernante de turno mientras le profesa frases de la mayor amistad y se mantiene con un aplomo y sangre fría impecable ante cualquier acusación en su contra. DE NUEVO.

No sé ustedes, pero si yo fuera sultán en esa zona del mundo dentro del universo salgariano, no dejaría acercar a ningún embajador o cónsul británico a menos que lo rodee con veinte guardias ne marca personal. Porque es casi seguro que será Yañez de Gomera.

En este caso, amén de repetitivo, que el secreto se mantenga es casi implausible. Tras secuestrar el barco donde iba el cónsul británico, los marineros LLEGAN A LA CIUDAD DEL SULTAN mientras Yañez mantiene la farsa y queda clarísimo que, cuando menos, el “cónsul” anda en algo muy turbio. Que no lo detengan en dos segundos es directamente o sinónimo que le sultán es un oligofrénico o que Salgari quiere que las cosas se resuelvan  porque... bueno porque son los buenos.

Y Sandokan vuelve a ser el convidado de piedra de su historia, apareciendo al final casi como para justificar el nombre. Se nota que, a esa altura, Salgari seguía exprimiendo la vaca de su personaje exitoso, pese a que realmente ya no le interesaba mucho.

Eso sí, la escena final, tras recuperar la isla, con los dos amigos ex piratas ya veteranos recordando su pasado es memorable. Si la serie terminaba en esa escena, yo me daba por satisfecho.

Y el personaje de Lucy van Harter, la pasajera holandesa que ayuda a Yañez en la historia, es maravilloso y merecía que tuviera más espacio que el que consigue en ese libro.

O sea, en síntesis, vale la pena por ver a Mompracem recuperada. Pero definitivamente es el peor libro de la serie de Sandokán que me ha tocado leer hasta ahora.

El desquite de Sandokan

El desquite de Sandokan

Título original: Sandokan alla riscossa (1907)

Autor: Emilio Salgari

Colección: Lo mejor de Emilio Salgari nº 7

Edita: Nauta, 1972

 

Tardé 30 años en leer este libro, continuación de La conquista de un imperio, con lo que les puedo asegurar, lo disfruté como un loco. Así que tengan esto en mente a la hora de leer esta reseña: ya estoy a favor de la novela, no importa lo mala que pueda ser.

Al final de la novela anterior, nos encontrábamos con Sandokan prometiendo volver al sultanato de Kini Ballu, lugar donde su familia había reinado hasta que un golpe palaciego había derrocado y exterminado a todos, excepto al futuro Tigre de la Malasia. Esta novela comienza con el arribo de la expedición del Tigre y sus amigos, listos para marchar entre la jungla y arrojar a los usurpadores. Peor hay un factor que cambia el juego: Teotokris, el griego que había sido la principal oposición para que Yañez y Surama consiguieran el trono de Assam, escapa de la captura en que se hallaba a manos de los Tigres y consigue revelarle el peligro al sultán. Por eso, la sorpresa falla y nuestros héroes deberán enfrentar una complicadísima marcha por la selva, asediados por los dayakos leales al sultán antes de poder conquistar Kini Ballu.

Si bien la novela es básicamente una larga marcha por la selva, esa novela recuperau n poco algo que se venía perdiendo en las novelas antihéroes, a saber el protagonismo de Sandokan, reducido a figurón que aparece en el último momento, mientras que la parte del león de la historia la llevaba Yañez. Aquí Sandokan es uno más del grupo que arriesga en todo momento su vida para triunfar finalmente. Y eso es bueno porque conseguimos una variedad de personalidades (también pesan mucho Termal Naik y Kammamuri en la historia) que emparejan al flemático portugués. Y Salgari se entusiasma con la camaradería entre ellos, todos piratas veteranos (incluso reflejando con nostalgia el paso de la edad para todos ellos), convirtiendo la novela en una historia casi colectiva.

Otra cosa deliciosa es descubrir mas detalles del pasado de Sandokan, ya que aquí explica mas profusamente cómo llegó un príncipe indio a ser un pirata. El pasado difuso, apenas nombrado en novelas anteriores, se convierte en datos tangibles. Y ayuda a darle personalidad al Tigre.

Y personalmente Teotokris es el villano más redondo de toda la saga, más incluso que Sudoyhana. Porque el griego es astuto, con redaños y se le nota la cintura política. Es una lástima que esta sea su última novela, donde se lo sacan de encima demasiado rapidamente. De hecho si esta novela tiene una crítica es justamente la velocidad para resolverla. Tras una construcción larguísima, el conflicto final se resuelve en unas pocas páginas, como si Salgari se hubiera quedado sin páginas para contarlo, lo que convierte el final en anticlimático.

Más allá de eso diría que esta es una del as novelas más interesantes y donde Salgari está poniendo entusiasmo. Valió la pena esperar tres décadas para leerla.

Argentina zombie. Historia oculta de la patria

Argentina zombie. Historia oculta de la patria

Autor: Luciano Saracino

Colección: Reservoir Books

Edita: Random House Mondadori , Buenos Aires, 2013-10-04

 

En términos de marketing , yo soy el target de este libro

¿Me gusta la historia argentina? Sí, muchísimo, especialmente sus episodios más oscuros y bizarros (y los hay por kilo).

¿El subgénero conspirativo, ese que indcia que “todo lo que sabías en realidad no es asi”? Indudablemente

¿Los zombies? Sí.

¿Luciano Saracino? Me parece uno de los guionistas más interesantes que Argentina ha dado en los último años, tanto en la historieta otros medios.

O sea, a todas luces este libro debería encantarme.

Y sin embargo…

Aclaremos de entrada que no es un mal libro. La cantidad de ideas que se le ocurren a Saracino con el tema son apabullantes. Algunas son más o menos esperables (la epidemia de fiebre amarilla que en realidad es un ataque masivo de muertos vivientes) mientras que otros son de una brillantez que se merecen el aplauso (la explicación de las estrofas que no se cantan del Himno Nacional y que se relacionan con los brotes zombies). Saracino demuestra un gran conocimiento de la historia argentina, sacando a relucir no solo elementos conocidos sino historias que muchas veces no son conocida pro el público común. Y escribe bien, ágil, entretenido. Y las ilustraciones de Daniel Eduardo Mendoza son un gran complemento.

Pero…

Pero 1: Hay grandes ideas. El libro está lleno de ellas… pero da la sensación muchas veces que son argumentos a la espera de un desarrollo, cuentos por nacer.

Pero 2: La limitación que TODOS los episodios sobrenaturales sean básicamente zombies atacando termina cansando por lo monótono. Eso es un drama del subgénero. Como dije en otra reseña, el drama de los zombies es que son un recurso tan limitado como las pirañas: atacan y comen. Nada más. Y eso afecta al resultado final. Esas mismas historias aplicando otros giros sobrenaturales hubieran sido mucho mas interesantes, al menos en algunos casos.

Pero 3: ¿Después de la ley Saenz Peña no hay más zombies? El siglo XX argentino tiene momentos tan convertibles en historias zombificadas como el resto de la historia argenta. Aunque puede ser una más que entendible decisión de Saracino o de su editor  por su seguridad personal y/o economica. Digo, andá a joder con peronismo, radicalismo, dictadura, represión,etc y zombies. Tenés bastantes números de comerte un juicio por parte de esos sacrosantos defensores de la patria. Si por un chiste boludo se comió Gustavo Sala un quilombo enorme, andá a hacer algo con zombies y desaparecidos si sos guapo.

Y esto no es un pero porque es parte básica de la obra y sino no tendría sentido, pero sin un conocimiento sólido de la historia argentina, este libro no puede disfrutarse.

En balance, el libro me gustó pero me queda la sensación que podía haber dado más. Un remolino de grandes ideas que necesitarían expandirse como relatos.